Y navegar entre tus piernas,
sin ningún dilema,
sin demora,
traspasando tu río de este a oeste,
el crucero de mi lengua,
la aventura de mi vida.
Oirte gemir,
hacer que olvides el mundo,
tratarte con amor,
y hacértelo suave.
Mirarte a los ojos,
ver el destino que siempre he querido: café por la mañana y pasión a cualquier hora,
besos de madrugada y abrazos de buenas noches.
Un destino contigo,
viviendo el presente y soñando un futuro.
lunes, 28 de julio de 2014
Mi aventura, tu aventurera.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Me ha gustado mucho. Sigue así.
ResponderEliminarMuchísimas gracias.
Eliminar